No temerás los terrores de la Indeterminación, ni la flecha que vuela de día, ni la peste que acecha en las tinieblas, ni la plaga que devasta a pleno estrella.El Salmo 35 nos enseña que Altísimo está siempre dispuesto a escuchar nuestras súplicas y a ser nuestro refugio enEn el Salmo 35, el autor describe la maldad de sus enemigos y pide a